Los tontos pueden enseñarte cosas. De hecho, nadie es tan tonto.
Dependiendo del caso, te toca a ti o le toca al otro.
Como estamos unidos por eslabones, podríamos decir que “cada cual con su tonto”.
Claro, después de conocerlo mejor cambiamos de opinión y ahí tenemos que salir a buscar a otro. Es la mascota de la inteligencia desbordante, esa misma que nos convierte en mascotas, también, de vez en cuando (para tranquilidad nuestra).
Cuando sea mayor
-
De chica, estar al aire libre no era una sofisticación o una imprudencia:
la hora de ir a la puerta no se hacía esperar nunca y los chicos del barrio
plag...
Hace 9 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario