Un gitano, el tablao. Cajón y palo seco a la escobilla de bulería, mientras una mujer blanca de finos rasgos, se sienta a la mesa más cercana al escenario.
El gitano distrae su mente, pero su cuerpo salvaje-independiente sigue cabalgando sobre pies de madera y clavos. Ella insiste y desde los ojos, aguijón de sutil verde clava.
Intoxicado el gitano da piruetas; planea acabar con las tablas. Ella sin embargo, insinúa desde su elegancia, el escote que libera perfume y esclaviza. “Mi padre es andaluz”, le dice subiendo al escenario. “Me lo han dicho tus verdes ojos”, le responde.
Ella hace un gesto al cajón y guitarra para que no interrumpan y sin más, desgarrando el vestido y descosiendo el cabello, comienza a dar vueltas quebradas transformándose en un trompo.
Volviéndose luego tornado arrastra a su presa lejos, quién sabe dónde, para dar compás tal vez a un tango.
El gitano distrae su mente, pero su cuerpo salvaje-independiente sigue cabalgando sobre pies de madera y clavos. Ella insiste y desde los ojos, aguijón de sutil verde clava.
Intoxicado el gitano da piruetas; planea acabar con las tablas. Ella sin embargo, insinúa desde su elegancia, el escote que libera perfume y esclaviza. “Mi padre es andaluz”, le dice subiendo al escenario. “Me lo han dicho tus verdes ojos”, le responde.
Ella hace un gesto al cajón y guitarra para que no interrumpan y sin más, desgarrando el vestido y descosiendo el cabello, comienza a dar vueltas quebradas transformándose en un trompo.
Volviéndose luego tornado arrastra a su presa lejos, quién sabe dónde, para dar compás tal vez a un tango.
Guau! muy bueno y me encantó el final de tango
ResponderEliminarbesos y gracias por compartir en una ma►ana llena de sol en Miami
Gracias por tu visita,
ResponderEliminarUn saludo
Una bella instantánea de un momento apasionado e intenso de la noche, amiga. Tienes un bello y original espacio. Agradezco tu visita y te beso,
ResponderEliminarV.
Prueba a leer en El Otro Lado... ahí sí está en castellano.
ResponderEliminarUn saludo
Veo que hemos coincidido en un
ResponderEliminar"Almuerzo"
Gracias por la visita y el comentario.He leido tus impudicas predicciones, me quedo con las más tristes...
Bukow
Se ve que vives el flamenco como adecuado material de la noche.
ResponderEliminarPrecioso.
Besos
Aunque tenía buen arranque para salir del paso, al gitano en verdad ni se le había ocurrido que su padre fuera andaluz. Había bailado para ella pensando que ella nunca había visto algo parecido. Por eso, en cierto modo, era una lección de humildad verla bailando así. El gitano se sintió carente de los habituales atractivos con los que seducía cada noche a cualquier extranjera, como Sansón sin cabellera. Fue por eso que, en el momento en que ella sube al escenario, lo hace tomando las riendas de la noche que, con tango o sin él, será inolvidable para los dos: para la paya y para el gitano.
ResponderEliminarun saludo Svor
tienes un blog interesante
¿por qué dos?
Grabriel, me encanto tu analisis y mas aun por tomarte tiempo que vale oro.
ResponderEliminarPor que dos blogs? La verdad que podria tener uno solo... seria mucho mas comodo a la hora de acturalizarlo... Lo hice en verdad para separar formas, experiencias y estilos. Pero la verdad que tener uno seria lo mejor, ahora que ando con tan poco tiempo.
Casi pueden oirse los zapateaos. Linda descripción, precioso microcuento. Un saludo.
ResponderEliminarhermoso final tanguero...
ResponderEliminarMe gustó.
ResponderEliminarVolveré con frecuencia.
Un saludo afectuoso.
el desenlace exacto de un encuentro al parecer, por siglos pactado.
ResponderEliminarbesos.
Buen relato. Enhorabuena.
ResponderEliminarOjalá fuese música para acompañar tu baile...
ResponderEliminarUn fuerte abrazo desde el Otro Lado
hermosas elocuencias…
ResponderEliminary yo te siento, sangre; te alojo, tango, mas allá...
Tabaco de soledades y sombras inquilinas
(no buscarte es buscarme).
Soberbia, se decanta a ser decida.
Aniquilación lenta la vida, trauma de sujetos,
asiento para dos,
prosa, melodía, jazmines arrancados…
y ventanas empañadas.
La danza, ambas son muy sugestivas.
ResponderEliminarLo que valoro del tango es ese contacto fìsico intenso que raramente tienen otras danzas.
Andalucìa...bellos recuerdos.
Un beso, Svor
No hay nada mejor que improvisar un tango, aunque sea sin mover un solo músculo. A veces, el ritmo se vuelve frenético desde la complicidad de una mirada o desde el murmullo de una respiración entrecortada.
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